Tipos de whisky
Whisky de malta:
elaborado completamente de
cebada
malteada
y destilado en "pot still", alambique utilizado para la
destilación de este tipo de whisky, con forma de
cebolla.
Antes de ser embotellado, se deja envejecer normalmente durante
un periodo de entre 8 y 15 años. Es un whisky con sabor, potente
y de mucho carácter.
-
Whisky de grano:
hecho a partir de cebada sin maltear, maíz y otro tipo de
cereales, siendo también posible el malteado. Se suele
destilar en "Coffey stills", alambique de destilación
continua.
Los whiskies de malta
y de grano están combinados en diversas maneras
-
Mezcla de
maltas (Vatted Malt): mezcla de whiskies de malta de
diferentes destilerías, lo que se conoce como "single malt".
Si un whisky es etiquetado "pure malt" o solamente "malt",
es casi seguro que será un vatted malt. Es también
etiquetado frecuentamente como whisky de malta mezclado. Los
whiskies se grano no intervienen en su composición.
-
Whisky proveniente de una única
destilería (Single malt): whisky procedente de una única
destilería pero que contiene mezcla de whiskies de varios
barriles, a no ser que este descrito como "single-cask".
Normalmente, el nombre del whisky coincidirá con el nombre
de la destilería e indicará los años que ha permanecido en
el barril o si ha sido madurado en un barril de
vino de Oporto.
La elaboración de estos whiskies es de cebada malteada,
fermentada, destilada en dos ocasiones y madurada en
barricas como mínimo durante tres años.
-
Pure pot still whisky: whisky
destilado en un alambique "pot still" (como single malt)
hecho de cebada malteada y no malteada. Es exclusivo de
Irlanda.
-
Whisky
mezclado (Blended): mezcla de whiskies de grano y de malta
(entre el 10% y el 15%), siendo todos ellos procedentes de
varias destilerías. Son whiskies más baratos.
-
Cask strength:
literalmente "fuerza de la barrica", es un whisky que no
recibe ninguna dilución antes de su embotellamiento,
directamente de la/s barrica/s seleccionadas, conservando
así su graduación.
Los whiskies no maduran en la botella,
solo en el
barril,
por lo que la edad de un whisky es el tiempo entre destilación y
embotellamiento. Ésto refleja lo que el barril ha interactuado
con el whisky, cambiando su composición química y su sabor. Los
whiskies que han estado muchos años en botella suelen tener más
valor, aunque no son más "viejos" ni necesariamente "mejores"
que un whisky recientemente madurado en madera por un tiempo
similar.